Me licencié en Psicología en la Universidad de Barcelona.
Probablemente por mi interés en la medicina y la ciencia, mis primeras experiencias laborales se dieron en el contexto de la Neuropsicología y la investigación. Cursé un Máster en Neurociencias mientras trabajaba en el Center for Brain and Cognition de la Universidad Pompeu Fabra, investigando sobre el desarrollo del lenguaje en la infancia y el bilinguïsmo.
Transcurridos un par de años y, tras iniciar mi propio proceso de terapia, aumentó mi interés en la Psicología clínica y cursé un Máster en Terapia Familiar Sistémica en el Hospital de Sant Pau que me acreditó para acompañar también a parejas y familias.
Mi camino como psicoterapeuta se inició en el Centro Internacional de Psicoterapia Hestía, donde acompañé a personas expatriadas (y sus familias) en sus procesos de adaptación, con todo lo que conlleva a nivel emocional (ansiedad, tristeza asociada a procesos de duelo, revisión y construcción de la identidad, gestión de las familias y de uno mismo en relación a estas, etc). Además, complementé mi formación con un Máster en Terapia relacional, del Centro de Psicoterapia relacional y familiar de Tarragona y una formación en el modelo de Terapia Reconstructiva Interpersonal, de Lorna Smith Benjamin.
Transcurridos 4 años amplié mi experiencia laboral trabajando en el centro de hospitalización para adolescentes ITA, acompañando a adolescentes en su camino hacia la adultez (con adicciones y problemas de conducta), trabajando en terapia individual, grupal y familiar.
Desde 2016 empecé mi camino de forma autónoma en consulta privada, donde he tenido la oportunidad de acompañar a personas desde la adolescencia hasta la senectud, a parejas y familias.
A nivel profesional me describiría como una persona curiosa, con ganas constantes de aprender, y con un respeto muy profundo a las personas y sus procesos y ritmos. Con una mirada optimista hacia el cambio y con confianza en los recursos y potencialidades de las personas.