La terapia familiar está indicada en aquellos casos en los que la familia en conjunto sufre debido a una dificultad de relación entre sus miembros; o bien cuando un miembro de la familia presenta dificultades que suponen un reto e impactan en el bienestar familiar. La aparición de dificultades puede estar asociada a alguno de los siguientes casos, entre otros:
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- Síntomas en uno o varios miembros de la familia (comportamentales, emocionales)
- Dificultad de entendimiento y relación entre los miembros de la familia
- Familias con hijo/as adolescentes
- Discrepancias y dificultad de llegar a acuerdos en decisiones familiares
Mi papel como terapeuta es el de acompañaros y ayudaros a explorar y detectar el origen del malestar, así como alternativas de funcionamiento desde la activación de los recursos de la familia y de cada uno/a.
En una primera sesión, y tras conocer el motivo de consulta, podré orientaros hacia qué tipo de terapia es el más adecuado para vosotros en este momento. Deben cumplirse ciertos criterios para que la terapia familiar pueda realizarse de forma exitosa.
Es posible que dentro del proceso de terapia familiar se combinen sesiones conjuntas con todos los miembros de la familia, sesiones con una parte de la familia o sesiones individuales.