Terapia individual

La terapia individual está aconsejada en aquellos casos en que la persona que consulta padece algún malestar interno y tiene la motivación de tratarlo. El objetivo es aliviar el malestar mediante la activación de recursos propios.

Las siguientes situaciones, entre otras, pueden beneficiarse de terapia individual:

    • Ansiedad
    • Tristeza o depresión
    • Patrones de conducta repetitivos que generan malestar y de los cuales uno siente que no puede salir
    • Rupturas sentimentales
    • Cambios de rumbo profesionales
    • Dificultad de adaptación a cambios
    • Tensiones relacionadas con el ciclo vital
    • Crisis existenciales
    • Procesos de duelo

En una primera sesión, y tras conocer el motivo de consulta, podré orientarte hacia qué tipo de terapia es el más adecuado para ti en este momento.

Es posible que a alguna sesión se invite a otros miembros del entorno del paciente si se acuerda conjuntamente terapeuta-paciente que puede ser beneficioso para el proceso terapéutico.